Desde sus inicios en Francia, el ideal Marista era dedicarse a la educación de los niños de los pueblos rurales y las periferias. Hoy, después de 41 años de misión en Paraguay, los objetivos fueron cumplidos y se renuevan cada año con la misma fuerza con la que su fundador, San Marcelino Champagnat, inició ese gran sueño que es toda una realidad.
El sábado 26 de octubre del 2010 se realizó en la ciudad de Horqueta un gran festival que congregó a todas las comunidades Maristas del País, para conmemorar los 40 años de presencia Marista en el país. Cada localidad donde se encuentras los Maristas (Asunción, Limpio, Oviedo, Horqueta y Caaguazú), participó demostrando las habilidades de los alumnos de los diferentes centros, llamativos números artísticos, dejaban ver el talento de los niños y jóvenes, quienes se presentaban con mensajes alegóricos a los 40 años.
Durante todo el festival no dejo de recalcarse el slogan que representaba los objetivos maristas para ese año: “Corazones nuevos para un mundo nuevo”.
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